Hay momentos en los que desearías poder acarrear con los problemas de otra persona, ser esa persona, asumir sus problemas para que puedan seguir adelante, para no verles sufrir de esa manera sin tu poder hacer nada para remediarlo.
Hay momentos en los que te sientes tan impotente que rezas por cambiar su situación, por ayudar, porque las cosas mejoren de un momento a otro, pero por desgracia, hay cosas que no dependen de ti, solo te queda esperar y hacer todo lo que este en tu mano, aunque sea completamente inútil. Es ley de vida desear lo que no se puede tener...
Hay momentos en los que sencillamente no se que hacer, no se como actuar, y me martirizo a mi misma pensando que lo que haga y como lo haga es crucial, y recordadno una y otra vez mis multiples fracasos, analizando posibles motivos para no cometer los mismos errores, pero nunca sabiendo que hice mal y que debería hacer diferente. Me gustaría poder especializarme en problemas, actuar de la forma adecuada para reconfortar a la gente, decir las palabras adecuadas y no equivocarme constantemente...
